La proliferación de noticias de tomas compulsivas de terrenos por hordas de pobres y extranjeros o alguna que indica el intento de saquear un supermercado, no alcanzan a generar el estado de histeria colectiva que sí generaron en 2001 o en 1989. ¿Por qué será?El bombardeo mediático tiene una clara direccionalidad política. Y es la misma que en aquellos años dolorosos: el golpe.
Sin embargo, la reproducción minuciosa del esquema de laboratorio del duhaldismo, que probó varias veces su eficacia en la desestabilización institucional y que constituye el luctuoso regalo navideño que el ex bañero de Lomas hace a los argentinos cada tanto, no está funcionando.
Es que, en el santo nombre de Perogrullo, se dirá con razón que hay al menos dos de los términos de la ecuación del golpe de Estado alla Duhalde varían dramáticamente con respecto a ocasiones anteriores: el Gobierno atacado no es débil y la Argentina no está en crisis. Todo lo contrario, se trata de un Gobierno dueño absoluto de la escena pólítica, con la inicitaiva en ristre y sin competidores de fuste a la vista. De hecho, sus principales opositores son los medios de comunicación concentrados y sus escribas a sueldo fijo. Lo opositores políticos no existen. En cuanto a la crisis, me imagino que no hace falta abundar.
Por cierto que el modelo económico peronista no ha logrado todavía llegar a todos los argentinos con la justa distribución del ingreso. Sería idiota negarlo, así como es directamente hipócrita e hijo de puta reclamar la solución inmediata QUE JAMÁS NADIE PROVEYÓ y que resulta imposible. Porque quien se rasga las vestiduras esgrimiendo la relación entre crecimiento y distribución OLVIDA a propósito cuál es el origen, o sea, desde qué abismo venimos. Será porque quien maneja estos reclamos es, invariablemente, un agente de la ideología que provocó justamente el desastre socio económico que NADIE puede solucionar en apenas siete años, por más buen gobierno que haga.
Esta variante de las "costumbres argentinas" en materia del eterno retorno de las crisis, imposibilita la entera operatividad de la maniobra de la derecha. Es decir, la derecha está operando como suele hacerlo (con la vida y muerte de los más pobres) para herir al Gobierno.
La propia Presidenta de la Nación puso a esto nombre y apellido: "Quitandole la vida al otro no vamos a lograr el país que todos queremos. Esto no se desmadró se apadrinó".Nos quieren imponer un miedo viejo, imaginan una navidad con estado de sitio y fuerzas de seguridad desplegadas en las calles. Es estrategia antigua y conocida de los apóstoles del "orden": crear el caos para después vender la solución. El duhaldismo y sus aliados buscan volver atrás el reloj de la Patria. Ya no es volver a los noventas. Será un error creer que solamente ansían negocios con el país como zona liberada a sus apetencias: lo que la derecha quiere no es volver a 1990 sino a 1976. Eso vende Duhalde hoy. El orden del cementerio y las tumbas NN.
Por desgracia para esta secta asesina, la mayor parte del pueblo ha comprendido que el verdadero orden es democrático. Que no hay tal "orden" bajo el imperio del autoritarismo criminal, el gatillo fácil y las bandas de killers a sueldo que desmalezen el terreno para los empresarios. El orden verdadero es una sociedad viviendo bajo el imperio de la ley, y no dejando a nadie en el camino.
1 comentario:
soba ortos de pedraza,ahora estan con cristina y cuando pedraza este con dualde con quien van a estar
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