No queremos dejar pasar por alto esta fecha, tan particular, tan triste para todo el pueblo peronista. No debemos olvidar, debemos tener siempre en claro que el verdadero peronista va a sufrir toda la vida el odio gorila, en todas y cada una de sus manifestaciones.
El 16 de Septiembre de 1955, las Fuerzas Armadas Argentinas se olvidaron que las armas se las da el pueblo para defenderlo, y no para alzarse contra el.
Los fusiladores tomaban el poder. Ya habían demostrado su furia asesina en el bombardeo cobarde y asesino a civiles inocentes en Plaza de Mayo, en el cañoneo sobre Mar del Plata, en las bombas colocadas por los comandos civiles, para matar obreros en las puertas de los subtes. Quince mil compañeros presos, un millón de desocupados y un sin número de muertos, que tiñeron con su sangre peronista este suelo. Él desprecio por la vida, y la crueldad de los golpistas no tuvo límitesLo que paso el 16 de septiembre de 1955 es solo una muestra de lo que los cipayos gorilas pueden hacer cuando el pueblo osa ponerse de pie y querer marcar su propio destino, aniquilar todo lo que tenga olor a pueblo, a peronismo.
Esperamos que todos los compañeros recuerden con honor a todos nuestros caídos y aprendamos de su ejemplo de dar "LA VIDA POR PERON".
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